domingo, 6 de diciembre de 2020

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber

¡Paz a tu corazón, mi amado hijo!

Hijo mío, hoy todo el Cielo está de fiesta, por la gran gracia y don, concedidos por la

Santísima Trinidad Padre, Hijo y Espíritu Santo a tu familia, con la ordenación sacerdotal de mi hijo Emerson Gabriel, tu hermano. Todo el cielo estará presente en este gran día solemne en la vida de mi amado hijo, que dijo sí a mi Hijo Jesús: de forma especial el Santo Protector de su Congregación, tu madre Maria do Carmo, tu hermano Quirino, tus abuelos paternos y maternos, así como tus tíos y tías, tus primas Iris y Horatia, y otros primos muy lejanos del pasado, que partieron hace muchos años, que esperaban este momento solemne para unirse al Señor en su gloria.

Esta gran gracia atrae hoy del cielo a tu familia grandes gracias, bendiciones y luces que no puedes imaginar. El poder del infierno tiembla desde ahora por lo que va a suceder y ya está postrado en tierra, aniquilado por el poder de mi Hijo Jesús que se unirá con tu hermano como uno solo y toda tu familia se unirá como una sola con ellos y juntos serán ofrecidos al Padre Eterno, por medio del Espíritu Santo, como una ofrenda perenne de amor para la salvación de la Santa Iglesia y de muchas almas.

Reza, reza, reza, hija mía. Dios está contigo y con tu hermano. Dios te utilizará como su sacerdote eterno y a ti como su profeta, en estos tiempos presentes: ¡Sube a la cima de una montaña, heraldo de Sión! ¡Grita con fuerte voz, heraldo de Jerusalén! Alza tu voz sin miedo y di a las ciudades de Judá: He aquí a vuestro Dios. El Señor Dios viene con poder, su brazo dominará. Con él viene su premio, su recompensa le precede. (Is 40, 9-10)

Te bendigo, hijo mío, y a toda tu familia con mi bendición especial y maternal: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.