sábado, 12 de diciembre de 2020

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber

¡Paz mis amados hijos, paz!

Hijos míos, yo, vuestra Madre Inmaculada y Reina del cielo y de la tierra, vengo a pediros que sigáis rezando el Santo Rosario todos los días por la conversión del mundo y la salvación de las almas. No seáis perezosos para rezar, sino acercaos cada vez más a la oración, porque en los tiempos más difíciles, los que me han escuchado sabrán soportar las pruebas que caerán sobre la humanidad pecadora.

No te alejes de la gracia de Dios con el pecado. Estad siempre preparados, y así os regocijaréis en el Corazón de mi Hijo Jesús, y seréis siempre dignos de su bendición y de su gracia. Mi Hijo os dará mucha fuerza para testimoniar su presencia y su amor en el mundo. No permitas que el demonio te engañe con sus ilusiones y errores. No os dejéis engañar por las falsas doctrinas y errores que han entrado en la Santa Iglesia ni por los lobos con piel de oveja que actúan para destruir la fe, los dogmas y las enseñanzas que os dejó mi Hijo Jesús. Seguiréis viendo grandes penas y escándalos por culpa de hombres malvados, sin fe y sin luz, que causarán grandes daños, alejando a muchos de la verdadera fe.

Rezad hijos míos, rezad mucho, porque Dios actuará para defender a todos los que invocan su Santo Nombre y le sirven.

Luchad con la palabra de Dios meditada cada día, y con el Rosario en vuestras manos. Cuando rezáis mi Rosario los demonios se ven obligados a postrarse en el suelo, sin fuerzas para no dañar a las almas, así que rezad siempre más.

Os amo y vengo del cielo para ayudaros y daros tantas gracias para que podáis resistir a estos malos tiempos. Ánimo, no estáis solos, estoy aquí y soy la Madre amorosa de cada uno de vosotros y bajo mi manto os pongo uno a uno para que estéis protegidos contra todo mal. Os bendigo a todos: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.