sábado, 5 de diciembre de 2020

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber

¡Paz mis amados hijos, paz!

Hijos míos, yo, vuestra Madre Inmaculada, vengo del cielo para llamaros a Dios. Dios os llama a través de mí a la conversión y a la santidad. Cambiad de vida, hijos míos, cuanto antes. Antes de que lleguen los grandes acontecimientos y los grandes dolores del mundo. Estad atentos a los signos de Dios, que ya son muchos, y muchos son los que no ven nada ni oyen nada porque están ciegos a las obras de Dios, pero ven fácilmente los engaños y las obras de las tinieblas de Satanás que actúan libre y fuertemente en el mundo.

Oh, humanidad, ¿cuándo os decidiréis a escuchar la voz de Dios y a seguir su santo camino? Mi Corazón Inmaculado sufre por la dureza y frialdad de corazón de tantos hijos míos que no quieren convertirse, mi Corazón Inmaculado sangra por los muchos ultrajes, blasfemias e ingratitudes de todos aquellos que no creen en mis palabras maternales, que se burlan y ridiculizan mi amor de Madre tan querida, santa y preciosa para Dios. Oh, qué grande, terrible y pesada es la justicia de Dios sobre éstos... Tan terrible que hasta los Ángeles del cielo tiemblan y se postran con el rostro cubierto ante Su Divino Trono, y los hombres de la tierra hacen poco caso, sin el menor respeto.

Os amo, mis queridos hijos, y no quiero vuestra condenación eterna. Volved a Dios, volved a vuestro santo camino. No os dejéis engañar por las mentiras de Satanás y sus falsas doctrinas demoníacas que se están insertando en estos tiempos, vergonzosamente dentro de la Casa de Dios, dentro de la Santa Iglesia como si fuera verdad, pero las mentiras de Satanás no salvan, conducen al fuego del infierno. Abrid vuestros corazones y los ojos de vuestras almas, porque Satanás ya ha atrapado y engañado a muchos con sus errores, no seáis también vosotros uno de éstos, que estáis en peligro de condenación. Rezad, ayunad y sacrificaos por la conversión de los pobres pecadores, y muchas cosas tristes, graves y serias podrán cambiar y evitarse.

Rezad diariamente mi Rosario en familia. Las familias que recen diariamente mi Rosario completo serán preservadas de las terribles persecuciones, dolores y pruebas que muy pronto deberán soportar por parte de los secuaces de Satanás, que quieren destruirlas, para que no les quede nadie que hable de Dios y de su amor. A quien rece mi Rosario diariamente le prometo mi maternal protección y liberación de las manos de los hombres malvados corrompidos por Satanás y pasarán delante de ellos, seguirán adelante y estas familias no les tocarán ni les verán.

Rezad, rezad, rezad y tened fe y confianza y Dios os protegerá, hijos Míos. Os bendigo: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.