Mensajes para Marcos Tadeu Teixeira en Jacareí SP, Brasil

 

domingo, 7 de diciembre de 2014

Mensaje De Nuestro Señor - Nuestra Señora Y Santa Bárbara - Aniversario Mensual De Las Apariciones De Jacareí Y Santa Lucía De Siracusa (Luzia) - 352ª Promoción De La Escuela De Santidad Y Amor De Nuestra Señora

 

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Jacareí, 07 de Diciembre de 2014

Aniversario Mensual De Las Apariciones De Jacareí

352ª Clase De La Escuela De Santidad Y Amor De Nuestra Señora

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Mensaje De Nuestro Señor - Nuestra Señora Y Santa Bárbara

(Marcos): «Sí, está bien».

(Nuestro Señor): "Amados hijos Míos, hoy Yo, Jesús, Hijo del Padre Eterno, Hijo de la Santísima Virgen María, vengo a vosotros con Mi Madre y con Mi sierva Bárbara. Para bendeciros y deciros El Amor no es amado, Yo, el Amor Eterno, no soy amado por Mis criaturas y por eso Mi Corazón está siempre aplastado por una profunda ingratitud de los seres humanos.

Qué crueles son los seres humanos, no hacen más que pensar en pecados, guerras y crímenes por todas partes. Utilizan los Dones que les he dado: de inteligencia, de voluntad, de razón, y los talentos que les he dado todo para ofenderme. No hay parte de la tierra donde dirija Mi mirada que no vea continuamente: pecados, crímenes, guerras y maldad.

Mi Corazón está entristecido; está saturado del dolor y de la ingratitud que Me causan los hombres.

Por eso vengo a deciros, hijos Míos: ¡El Amor no se ama! Os he ofrecido Mi Amor eterno, os he ofrecido Mi Espíritu Santo, os he ofrecido Mi Palabra, os he ofrecido las riquezas, los tesoros de Mi Iglesia, os he ofrecido a Mi Madre, os he ofrecido a los Ángeles y a los Santos para que os ayuden. Y nada de esto, hijos Míos, os sirve de nada, porque vuestros corazones son duros como el mármol, vuestro corazón es un bloque de hielo, en el que ningún rayo de gracia procedente de Mí puede penetrar jamás.

No seáis, no seáis duros como aquellas personas que Me escucharon hace dos mil años y que Me llevaron a la Cruz precisamente porque no aceptaron Mi Amor, no comprendieron Mi Amor.

Arrepentíos, arrepentíos de vuestros pecados y amad al Amor. Amad al Amor que no es amado. Ama a Mi Corazón que no es amado. Este Corazón que nunca se cansa de buscarte, de ofrecerte tantas y tantas gracias para tu salvación.

No seáis como el traidor Judas, que fue uno de los seres humanos más favorecidos por Mí y por Mi Madre de todos los tiempos, y fue el que cometió la peor traición contra Mí.

¡No seáis como Judas, hijos míos! ¡No seáis desagradecidos! Aceptad las gracias que Yo y Mi Madre os hemos traído en Nuestras apariciones aquí. Estos Mensajes que os muestran, hijos Míos, cómo debéis vivir para ganar el Cielo. Este Cielo que os prometí como dije: En la casa de Mi Padre hay muchas moradas. Voy, pues, a prepararos un lugar. Sí, la casa de Mi Padre tiene muchas habitaciones, y quiero llevarte a ellas, pero para que habites en ellas, debes convertirte de verdad, apartarte del pecado, cambiar de vida, vivir los mandamientos que Mi Padre te ha dado. Vive de acuerdo con Mi Palabra.

¡Sí, pronto llegará el gran Castigo, Ajenjo! Se derramarán las copas, se tocarán las trompetas y toda la tierra temblará de pavor cuando llegue la hora de Mi gran Justicia. Reduciré a la nada vuestros placeres, diversiones desmesuradas y también todo aquello a lo que os habéis apegado, prefiriendo estas cosas a vuestro Creador. Reduciré a la nada los lugares de pecado, y arrasaré las ciudades donde hay más pecado, como Sodoma y Gomorra, hasta que no quede ni rastro, ni siquiera recuerdo, de ellas.

¿Por qué seré tan estricto, hijos míos? Porque los seres humanos no tienen piedad de ser estrictos con su Dios, crucificándole de nuevo cada día con sus pecados. Los seres humanos tampoco tienen piedad de ser estrictos con su prójimo cometiendo abortos, asesinatos, adulterios, traiciones, fornicaciones y toda clase de robos, deshonestidades, bribonadas y tantas cosas que hieren la caridad.

Por eso actuaré, actuaré con rigor para mostrar al ser humano que no morí, que no permanecí muerto. Morí pero resucité, que no morí para siempre. Esto quiero deciros: He resucitado, estoy vivo, y vivo aplicaré Mi Justicia sobre los pecadores.

Si no quieres estar entre esos ingratos a los que castigaré sin piedad, conviértete sin demora. Ahora vengo como Salvador Misericordioso, como dijo Mi Hija Faustina Kowalska, porque pronto vendré como Juez Imparcial.

Quien no quiera pasar por la puerta de Mi Misericordia, tendrá que pasar por la puerta de Mi Justicia. Y os digo, Hijos Míos: Será horrible ser atacado por los demonios y ser introducido en las llamas eternas, donde vuestro dolor no tendrá alivio, ni remedio que os haga pasar por la prisión de donde nunca saldréis, una prisión de por vida, y donde no tendréis descanso ni de día ni de noche. Y donde serás atormentado por los demonios, para que la Justicia del Padre sea satisfecha.

¡Será horrible! Si no puedes soportar el dolor del fuego ardiente de la tierra, ni siquiera durante unos segundos, ¿cómo podrás soportar el dolor de las llamas del infierno durante toda la eternidad? Piensa en ello, y no pecarás. Piensa en esto, y no Me ofenderás. Piensa en esto, y nunca más serás presa de las tentaciones y engaños de Mi enemigo, el demonio.

Vive en Mi gracia, ama a Mi Corazón que tanto te ama. Mi Madre y Yo llevamos aquí más de 23 años mostrándoos, demostrándoos constantemente Nuestro amor. Si Nosotros no os amáramos con el amor de la locura. Si no os amáramos con un Amor infinito, no continuaríamos aquí perseverando, buscándoos, luchando por vosotros, llamándoos a la salvación a pesar de vuestras continuas negativas a atender Nuestra Llamada, a atender Nuestras Advertencias.

El largo tiempo de Nuestra estancia en estas apariciones es la prueba colosal y magna del gran Amor que tenemos por cada uno de vosotros, hijos Míos. Lo que dije aquí y a Mi hijita Margarita Alacoque lo repito de nuevo: He aquí el corazón que ama tanto a los hombres, y a la mayoría de ellos sólo les paga con ingratitudes, pecados y ofensas.

Amad a Mi Corazón que tanto os ama y que se despliega cada día más en gracias y portentos para salvaros. Aquí está Mi Madre la Reina y Mensajera de la Paz, el Corazón Inmaculado que es la puerta y el camino por el que deseo que vengáis a Mí.

Os pido devoción a Mi Madre, porque Ella es el camino por el que bajé a los hombres desde el Cielo, y Ella es el camino por el que quiero que los hombres suban desde la Tierra hasta Mí. Muchos necios en el pasado han atacado Mis Mensajes aquí negándolos, diciendo que Yo pido Devoción a Mi Madre.

Si os pido Devoción a Mi Madre, oh necios, es porque Ella es el camino por el que he venido a vosotros y por el que quiero que vengáis a Mí.

Mi Madre os traerá a Mí, y Yo os traeré al Padre. Por tanto, tened verdadera devoción a Mi Madre, al Corazón de esta Madre. Que vuestro amor a mi Madre sea desinteresado, no a cambio de gracias y milagros, que sea firme, que no se debilite ante la menor tentación, ilusión o capricho. Que sea constante, que nunca desfallezca y que nunca deje de crecer en el verdadero amor a Ella, ni en los obstáculos, ni en los sufrimientos, ni en las pruebas, ni en las tentaciones.

Que sea un amor servidor, que encuentre su alegría en trabajar por Mi Madre para que Ella sea conocida y amada, y para que Sus Mensajes sean obedecidos por todos.

Que sea un amor generoso, que nunca se canse de sacrificarse por Ella y que nunca se contente con dar poco a Mi Madre, sino cada vez más y más para servirla. Que sea un amor profundo, intenso, un amor que nazca del fondo de tu corazón, como fue el amor de mi Alfonso de Ligorio por Ella, de mi Gerardo Majella, de mi Gabriel de la Dolorosa por Ella, de mis Pastores de Fátima por Ella, de mi Bernardita de Lourdes por Ella, de mi Marcos por Ella.

Que vuestro amor sea un amor ardiente por Mi Madre, como un fuego, tal como es el amor que arde en el pecho de Mi Marcos, Mi pequeño tortolito, Mi Benjamina predilecta elegida por Mí ya en el seno materno para ser Mi portavoz, Mi embajadora para vosotros, mediadora entre Mi Madre y Yo y vosotros. Para darte Mis palabras de vida, de vida eterna.

Mi Corazón quiere que vengas a Mí a través de Mi Madre. Así que ámala, reza todos los días el Santo Rosario. Quien reza el Santo Rosario cada día, alaba a Mi Madre, me alaba también a Mí cuando digo: Bendita tú eres entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús.

Sí, en el Rosario dais gloria a Mi Madre y a Mí, y Mi Sagrado Corazón con Su Corazón derrama sobre vosotros gracia sobre gracia, bendición sobre bendición.

En verdad os digo que quien reza el Rosario todos los días no morirá en pecado mortal. Porque Mi Sagrado Corazón buscará para estas almas todas las gracias para que esta persona deje este mundo en amistad Conmigo, en Mi Gracia, y no le mostraré en la hora de su muerte Mi Rostro airado, sino Mi Rostro misericordioso y benévolo para recibirla en las moradas de la casa de Mi Padre.

Aquellos que recen y amen el Rosario de Mi Madre serán amados por Mí como si fuera la fibra más íntima de Mi Sagrado Corazón como Mi propia gloria. Por tanto, amad el Sacratísimo Rosario de Mi Madre y haced que sea amado por todos.

Hoy, en el Aniversario de Nuestras Apariciones aquí a Mi hijito Marcos, os bendigo a todos con Amor desde Paray-Le-Monial, desde Dozulé y desde Jacareí.

Paz a todos vosotros, hijos Míos. Paz Marcos, el más trabajador y dedicado de los servidores de Mi Sagrado Corazón".

(María Santísima): "Hijos míos, hoy que estáis celebrando aquí el Aniversario Mensual de Mis Apariciones con todo el Cielo, a Mi hijito Marcos en este lugar, en esta ciudad de Jacareí. Y cuando estáis ya en vísperas de la Fiesta de la Solemnidad de Mi Inmaculada Concepción.

A todos os digo ¡Soy la Reina y Mensajera de la Paz! ¡Yo soy la Inmaculada Concepción! ¡Soy la Mujer vestida de Sol! ¡Soy la humanidad perfecta realizada en Dios! ¡Soy la nueva Arca de la Alianza! Soy la Señora que toda la tierra espera desde hace milenios y que ha sido concebida en el seno de la Madre libre de la mancha del pecado original, toda bella, toda pura, Tota Pulchra, toda amiga del Señor, preservada no sólo de la mancha original, sino también de toda mancha habitual. Llena de los Dones del Altísimo, de los privilegios del Señor, brillante como el Sol, bella como las estrellas, luminosa como el Sol en el punto más fuerte del día.

Soy el Sol brillante que el Señor ha colocado en el oscuro Cielo de la humanidad que durante tantos miles de años ha estado esperando a su Redentor. ¡Soy la Aurora de la Redención! Con Mi Inmaculada Concepción Dios inició efectivamente la obra de la redención del género humano. Porque cuando fui concebida sin pecado en el vientre de Mi Madre Ana, comenzó a pasar la Antigua Ley, para inaugurar la Nueva Ley. Y así, con Mi nacimiento, con Mi «sí», cerré la brecha que existía entre vosotros y el Creador. El Verbo tomó carne en Mi vientre, se convirtió en hogar y, con Su vida, pasión y resurrección, abrió de nuevo para vosotros las puertas del Paraíso cerradas por el pecado de Nuestros primeros Padres.

Soy la Inmaculada Concepción, soy tan Santa que soy la Santidad misma. Estoy tan llena de Gracia que soy la Gracia misma. Esto dije en Pesqueira, Pernambuco, a las dos muchachas a quienes me aparecí: ¡Yo Soy la Gracia! ¡En Mí encontráis todos la Gracia del Señor! No temáis a María, porque habéis encontrado la Gracia ante el Señor. Si ya era Inmaculada y llena de Gracia, ¿para quién encontré la Gracia? Yo la he encontrado para vosotros, Yo soy la Gracia, y todo el que venga a Mí saldrá lleno de la Gracia del Señor, la Gracia que santifica, la Gracia que purifica, la Gracia que eleva, la Gracia que perfecciona, la Gracia que embellece, y os hace reflejos vivos de la santidad de la Santísima Trinidad.

Yo soy la Gracia, y quienquiera que venga a Mí, por muy cargado de pecado que esté, si Me da su «sí», si tiene un verdadero deseo de amarme y de ser formado por Mí, Yo le conduciré a las Fuentes de la Gracia del Señor. Y esta alma se llenará de Su Gracia, se llenará de Su Amor, se llenará de los Dones del Espíritu Santo.

Soy la Reina y Mensajera de la Paz, he aparecido aquí con este título para deciros que vengo en nombre del Señor, trayendo la Paz que vuestras almas tanto desean, tanta sed tienen, tanta hambre tienen, y que no podéis encontrar.

Estáis castigados por Dios con la aflicción interior, con la angustia interior, con la falta de paz en vuestras familias, porque buscáis la paz donde no existe. La buscáis en los pecados, en las fornicaciones, en las posesiones materiales, en el dinero. Os construís falsos ídolos de placer, de poder, de codicia, de violencia, de egoísmo, adorándoos en lugar de Dios y como Dios. Pecáis como pecó Satanás, y por eso suceden tantos castigos en vuestra vida, no tenéis Paz, porque sólo en Dios podéis encontrar la verdadera Paz y poseerla.

Por eso he venido como Reina y Mensajera de la Paz, para deciros: que sólo en Dios podéis encontrar la Paz. Y puesto que Dios Me hizo Mediadora de la Paz, sólo a través de Mí puedes recibir la Paz del Señor. Quien quiera la Paz que venga a Mí, y Yo se la daré. Quien tenga su alma afligida, angustiada, sufriente, turbada e inquieta, que venga a Mí, y Yo le pacificaré. La llenaré de Mi Paz de tal manera que esta persona ya empezará a gozar en esta vida de la Paz de los bienaventurados del Cielo.

Reza Mi Rosario todos los días, el alma que reza Mi Rosario nunca será abandonada por Mí. Enviaré a Mis mil Ángeles Custodios para que la guarden en todos sus caminos y la ayuden en todos sus sufrimientos. Especialmente en las tentaciones, y si huye del pecado y no se rinde fácilmente a Satanás, Mis Ángeles la mantendrán siempre en el Amor de Dios.

El alma que rece Mi Rosario será acompañada por Mí dondequiera que vaya, y en todos sus asuntos, sufrimientos y dolores estaré a su lado, para sostenerla, ayudarla y guardarla.

Rezad todos los días el Rosario de Mis Lágrimas, porque a través de este Rosario os cubriré siempre con Mi Manto, y mantendré a Mi enemigo alejado de vosotros y de vuestras familias. Y si por casualidad entra en vuestras familias, no podrá causar mucho daño, porque con el poder de Mis Lágrimas lo repeleré, y mantendré el orden, la armonía y la paz familiar, siempre constantes en vuestro hogar.

Rezad Mi Seten todos los meses del 1 al 7 de cada mes, fielmente, porque a través de él, cada día os doy copiosas bendiciones, saco muchas almas del Purgatorio. Y te prometo que cada día del Septenio, mil pecadores serán tocados por la Gracia del Señor, se convertirán y se enamorarán del Señor.

Haced Mi Flecha, no sabéis lo poderosa que es, por eso la despreciáis. Si pudieras ver con Mis ojos cuántas almas son tocadas por la Oración de la Septena, la harías todo el mes, no sólo los siete días del mes.

Rezad, rezad Mi Seten, porque de ella depende la conversión de Rusia, de Brasil y de muchas naciones de la Tierra.

Bendigo a todos ahora desde Caravaggio, desde Lourdes y desde Jacareí.

Paz Mis amados hijos. Paz Marcos, el más dedicado y trabajador de Mis amados hijos y siervos".

(Santa Bárbara): "Amados hermanos y hermanas Míos, Yo, Bárbara, vengo hoy de nuevo a deciros: Os quiero, ¡os quiero mucho!

Os cuido, os protejo, os defiendo y estoy a vuestro lado incluso cuando vuestro corazón está duro por la falta de oración, por vuestro pecado y no sentís Mi presencia.

Cuántas gracias te concedo y cuántos favores derramo sobre ti cada día. Si tu corazón no estuviera tan cegado por tu pecado, vería las continuas pruebas de Mi amor y de Mi presencia para ti. Sí, Mi presencia cerca de ti.

Sigue Mis huellas brillantes, que como estrellas resplandecientes he dejado para ti en la tierra. Seguid Mis huellas de oración constante, de pureza, de fidelidad a Dios, de valor y fortaleza, que son muy necesarias si queréis salvar vuestras almas y alcanzar el Cielo.

Muchos piensan que siendo inconstantes, siendo cobardes ante el sufrimiento, alcanzarán la Corona de la Vida Eterna. No, el Cielo no es para los cobardes. El Cielo es para los héroes, para los valientes, para los que aceptan el sacrificio, que aceptan el sufrimiento cuando les llega por amor al Señor, por amor a la Madre de Dios, por amor a la causa de la salvación de las almas.

El alma que no acepta el sacrificio, que no acepta el sufrimiento por amor al Señor, por amor a la Madre de Dios, por amor a la causa de la salvación de las almas.

El alma que no acepte los sacrificios, que no acepte el sufrimiento cuando le llegue, no será digna de la Corona de la Vida Eterna. Comprendí esto cuando vi a Mi propio Padre entregándome a la prisión, a los azotes, a la tala, a la amputación de Mis pechos. Cuando vi a Mi propio Padre cortar Mi cuello. Lo acepté, aunque destruida por el dolor en mi interior, acepté el sacrificio, lo acepté por amor a Dios, por amor a Mi Madre celestial, por amor a las almas, a las que daba testimonio de Mi Fe para edificarlas. Acepté porque comprendí que sin sacrificio nadie es digno de la Corona de la Vida Eterna.

Cuando te llegue el sufrimiento, cuando te llegue el dolor en tu vida, acéptalo. Acepta la enfermedad, acepta la cruz, porque a través de ella salvarás muchas almas y la tuya propia. Si eres heroicamente valiente en el sufrimiento te esperará un gran premio y recompensa en el Cielo.

Por tanto, sigue Mis pasos audaces de amor a Dios que está hecho de sacrificio y obras. Recordad lo que la Madre de Dios os dijo aquí: ¿Me amáis? ¿Amáis a Mi Hijo? Entonces, sacrificaos por Mí, sacrificaos por Mi Hijo.

Aprended que el camino al Cielo está hecho de sacrificios, y que el amor no es sólo un sentimiento, sino que es principalmente sufrir por amor a Dios. Si comprendéis esto seréis grandes como Yo, seréis grandes como Yo en el Cielo. Y tu Corona de gloria será inmortal, imperecedera, y por los siglos de los siglos exultarás de amor y alegría en el Señor en la Gloria Eterna.

Amo este lugar que para Mí es el más precioso del mundo. Os amo a todos los que estáis aquí, he rezado por todos los que estáis aquí para que vengáis, para que seáis bendecidos, para que seáis colmados de los favores del Señor y de Su Madre. Soy la protectora más especial de todos los peregrinos de este Lugar.

Y ahora los bendigo a todos y los cubro con Mi Manto de Amor.

Paz, Paz a todos vosotros. Paz Marcos, el más ardiente de Mis devotos y de Mis amigos".

Orígenes:

➥ MensageiraDaPaz.org

➥ www.AvisosDoCeu.com.br

➥ www.AparicoesDeJacarei.com.br

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