sábado, 26 de octubre de 2019

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber

¡Paz mis amados hijos, paz!

Hijos míos, yo vuestra Madre, os estoy llamando a Dios, pero muchos de vosotros permanecéis sordos a mi voz maternal.

Os estoy llamando a Dios. Os estoy llamando a Aquel que es la Salvación de vuestras almas.

No cerréis vuestros corazones a la llamada del Señor. Él os ama y desea vuestra salvación eterna. No desea vuestra infelicidad, sino que comprendáis Su amor divino por cada uno de vosotros y tengáis plenamente Su paz.

Dobla las rodillas en oración. Los hombres son ciegos y sordos a la voz de Dios, y desean hacer su propia voluntad humana en lugar de la voluntad Divina.

Hijos míos, errores horribles sobre errores horribles serán aceptados y proclamados como procedentes de la voluntad de Dios, pero detrás de todo esto está Satanás con sus tinieblas y mentiras, que quiere apoderarse de vuestras almas y llevaros al fuego del infierno.

Luchad, hijos míos, contra todo mal, mentira y pecado. Decid a todos que Dios ya está muy ofendido y no quiere veros viviendo en pecado, lejos de Su Corazón Divino y de Su amor, que es eterno.

No os apartéis del Santo camino de Dios. No aceptes las mentiras de Satanás, sino proclama las verdades de Dios, pues sólo ellas te liberan del pecado y te dan la vida eterna. Tiempos de oscuridad y dolor acosarán al mundo si no se reparan los pecados y se combaten los errores.

Si los hombres permanecen sordos, les sobrevendrá un gran castigo. Rezad, rezad mucho, y Dios se apiadará de vosotros.

Recordad, hijos míos: no tengáis miedo. No os calléis, sino venced al mal proclamando la verdad. La verdad es mi Hijo Jesús, y él está con vosotros, y vosotros estáis unidos a él por el amor y la fidelidad a su amor y a sus palabras, que os salvan y os dan la luz, la luz que vence a las tinieblas.

Volved a vuestros hogares con la paz de Dios. Os bendigo a todos: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.