jueves, 22 de agosto de 2024

¡El Tiempo que Ahora Comienza Será la Purificación Anunciada a Vosotros!

- Mensaje nº 1447 -

Mensaje del 17 de agosto de 2024

Juan con Jesús, Dios Padre y Nuestra Señora: Hija mía. Tu mundo sufrirá un colapso , y este día se acerca.

Nuestra Señora: ¡Debéis rezar, amados hijos míos, porque la paz en vuestros países y hogares está en peligro!

Juan: Se acerca el día del juicio final , amados hijos. Yo, vuestro Juan, he venido a deciros lo siguiente:

El libro que comí, a instancias del ángel, contiene lo que está ocurriendo ahora mismo en vuestro mundo, en vuestra tierra. Es el fin de vuestro tiempo tal como lo conocéis, y amanecerá una nueva era. Esto requerirá una pur ificación , ¡una gran y para muchos agonizante purificación! Seréis sometidos a grandes pruebas , y yo, vuestro Juan, os digo hoy: ¡permaneced fieles a jesús!

Nuestra Señora: Orad, hijos míos, ¡debéis permanecer en oración!

Juan : El que no se mantenga firme perecerá en inundaciones de fuego , aunque sean las aguas las que lo arrastren, los vientos de tormenta los que lo arrastren o las masas de tierra las que lo traguen. Perecerá en las inundaciones de fuegoy se encontrará en el reino del diablo , pues: ¡Su alma es Inmortal! ¡Sabedlo!

Nuestra Señora: Orad, amados hijos, ¡debéis orar!

Juan: ¡El tiempo que ahora comienza será la purificación que se os ha anunciado! ¡Vuestros corazones serán puestos a prueba! ¡Sabedlo!

¡No podéis esconderos del Señor y Padre! ¡Todo es visible para Él!

¡No podéis fingir, ni mentir, ni pretender ser algo o alguien que no sois!

¡El Señor juzgará al final de esta purificación! Se le conoce como el Juicio Final.

Juan con Nuestra Señora: ¡Niños, niños! Permaneced en oración, pues no importa cómo os volváis apóstatas: Seréis juzgados según vuestras obras y fechorías, ¡y no habrá escondite para vosotros!

Juan: ¡Hijos, hijos! ¡Lo que he visto entre los hipócritas que hay entre vosotros apenas puede describirse con palabras terrenales! El tormento por el conocimiento, el dolor por la omisión, la miseria por la mentira... ¡La lista es larga, y el dolor de estas pobres almas que fueron infieles a Jesús, que le rechazaron, que le traicionaron (!) es grande, tan grande, ¡y no se lo perdona a nadie que se haya alejado de Jesús!

Juan y Dios Padre: Creed , amados hijos, ¡NUNCA que el infierno no existe!

¡ Creed , amados hijos, NUNCA que ya no existís después de vuestra muerte terrenal!

Tu alma es inmortal y vivirá para siempre, ¡en la gloria o en el tormento eterno! ¡Tú decides!

Juan y Nuestra Señora: Permaneced fieles a Jesús, y permaneced devotos a Él.

Nuestra Señora: ¡Rezad, hijos míos, rezad y suplicad al Espíritu Santo!

Juan : ¡Lo que yo, vuestro Juan, vi al final de los tiempos, es lo que está ocurriendo en vuestro tiempo presente!

¡No podéis huir de ello ni cerrar los ojos!

El fin se acerca, y no podréis huir de él, huyáis a donde huyáis:

Te alcanzará , y sólo el que esté con Jesús se salvará, y sólo el que permanezca fiel a Jesús será elevado.

Todos, repito, todos los demás irán por el camino de la perdición, y el diablo los atormentará y el tormento eterno será su suerte.

No lo creéis, pero lo experimentaréis si no escucháis la palabra del Señor y Padre, si no estáis preparados para todo lo que aquí se dice. Amén.

Dios Padre: Estos mensajes son Mi Palabra, y Mi Palabra es santa. Son para vuestra salvación, así que aceptadlos y preparaos.

Nuestra Señora: La oración os mantiene fuertes, amados hijos, os mantiene fuertes y firmes, y quien reza al Espíritu Santo recogerá sus frutos. Amén.

Tu Juan.

Apóstol y predilecto de Jesús, con Jesús, Dios Padre y la Madre en el cielo. Amén.