lunes, 12 de agosto de 2019

Mensaje de Nuestro Señor Jesucristo

A Su Amada Hija Luz De María.

Mi pueblo muy amado:

MI Amor Permanece Abierto Para Aquellos Que Desean Entrar En Mi CAMINO.

Hijos, debéis ser un testimonio vivo de Mi Amor, de Mi Caridad, hacia vuestros hermanos y hermanas.

ESTE No Es El Momento Para Los Lamentos: Ese Instante Llegará Pronto. Éste Es El Momento De La Decisión En El Que Cada Ser Humano Será Bendecido Con Mi Misericordia, Para Que Uno A Uno Vean Los Pecados Que Han Cometido Durante Toda Su Vida, Confesados O No. Verán El Bien Que Han Hecho Y Lo Que Han Dejado De Hacer, El Mal Que Han Cometido, Sus Pecados De Omisión, Todo El Pasaje Por La VIDA.

Quien obra y actúa a Mi Semejanza hacia sus hermanos y se arrepiente con todas sus fuerzas, facultades, sentidos y confiesa sus pecados, con firme propósito de enmienda, ese hijo Mío experimentará el AVISO (1) como todo ser humano, pero no con la intensidad con la que lo experimentarán aquellos que permanezcan en el fango del pecado por desobediencia, ignorando Mis llamadas, las de Mi Madre y las de Mi fiel San Miguel Arcángel.

Pueblo Mío:

Quiero que seáis verdaderos, y para ello tenéis que aprender de vuestras caídas, para que podáis levantaros, para que, al abrigo de Mi Misericordia, inundados por Mi Amor y el amor del prójimo, podáis salvaros, como el ladrón penitente; por eso, es esencial que Mis hijos pidan perdón y aprendan a PERDONAR.

La Criatura Humana es imperfecta en algún ámbito de su vida; ¡los que se creen rectos e irreprensibles necesitan revisarse interiormente! Mis hijos tienden a idealizarse, ignorando que lo que presumen puede convertirse en el aguijón que les impida acercarse a Mí.

No podéis juzgar a vuestro hermano antes de juzgaros a vosotros mismos; debéis decidiros a actuar con prontitud, hijos Míos, respecto a la falta de caridad hacia vuestros hermanos y hermanas.

¿Hay alguien irreprochable? Que vengan ante Mí y me digan cómo son de irreprochables, y Yo les responderé en el instante de la advertencia, cuando se vean a Sí mismos.

Pueblo mío: os habéis vuelto espiritualmente ciegos con corazón de piedra, sois pecadores que miráis con corazón endurecido a otros pecadores; criticáis, murmuráis en secreto de vuestro prójimo, creéis que tenéis razón y negáis a vuestros hermanos el amor y el perdón, y así os acercáis a recibirme con la arrogancia del que me abofeteó cuando comenzó el juicio contra Mí en el palacio del sumo sacerdote. (cf. Jn 18:2).

Y vosotros, Pueblo Mío, ¿a quién habéis juzgado y condenado, guiados por falsos testigos, que más tarde os traicionarán para intentar salvarse ante MÍ?

Debéis mirar dentro de vosotros mismos, examinándoos sobre todo en cuanto al Amor, al mismo tiempo en cuanto al perdón, a la caridad, y debéis encender la llama de la fe para que no la perdáis a causa de aquellos que yerran y en su caída hacen caer a otros para que no se levanten.

MI GENTE, VOLVERÉ ANTE VOSOTROS EN GLORIA Y MAJESTAD; ME VERÉIS COMO JUEZ.

¿CUÁNTOS En Su Lecho De Muerte No Se Perdonan Y Se Condenan A Sí Mismos? Hablo a los vivos, a Mi Pueblo, un Pueblo de vivos, no de muertos: os hablo para que actuéis y os enmendéis con prontitud.

Esta generación desobediente que no Me escucha, no escucha a Mi Madre, ni a Mi Enviado San Miguel Arcángel, por eso no os levantáis del lecho de muerte en el que permanecéis con vuestro orgullo y desobediencia, así la gran mayoría de la juventud actúa con arrogancia, señalando con el dedo a voluntad a sus mayores o a los de su edad; vivís en medio de «lobos con piel de cordero», sin límites ni fronteras.

Se están cumpliendo los grandes acontecimientos profetizados por Mi Madre en los lugares de las Apariciones verdaderas; Mis Instrumentos Fieles y Verdaderos, aquellos que son negados e incomprendidos por Mi Pueblo y que os han transmitido lo que sucederá en esta generación, son destituidos, y Mi pueblo, sin detenerse a mirar su obra y acción, sigue saltando poco a poco al precipicio de los vicios al que ha sido llevado por los secuaces de Satanás, aquellos que sin disimulo se reúnen ante la humanidad para decidir el destino de los pueblos, y la humanidad no razona, encontrándose sumida en los pecados junto con aquellos que no cumplen la Ley Divina. Ellos son los responsables de que el humo de Satanás que penetró en Mi Iglesia en el pasado, ahora la inunde y oscurezca por completo.

Por Amor te repito parte de la verdad para que despiertes; Soy Yo (cf. Jn 4:26) , Tu Señor Y Su Dios, Jesucristo, Quien Te Habla Con La Verdad, Porque Veo Los Corazones De Los HOMBRES.

Necesitas Salvarte, Necesitas Salvar A Tus Hermanos Y Hermanas, Necesitas Amarme, Pero Primero Ámate A Ti Mismo Y A Tu Prójimo.

Levanta Tu Mirada, Mira Hacia Arriba Y Clama En Oración, Confiesa Tus Pecados Y Recíbeme Para Ser Fortalecido, Pero Recíbeme En PAZ.

Pueblo Mío, ora para no perder la fe; ora y recíbeme en Mi Cuerpo y en Mi Sangre; no vengas a recibirme indignamente vestido; que no asista el que no tiene ropa para recibirme como los que sí tienen ropa y me ofenden.

NO TODO ESTÁ PERDIDO, PERO DEBES DESPERTAR SI QUIERES SALVARTE; CAMBIA TU VIDA, CAMBIA TU ACTITUD, AMA COMO YO AMO (cf. Jn 13,31) Y CONVIÉRTETETE. Sufro por vuestros sufrimientos, por lo que estáis viviendo y viviréis, por vuestras batallas espirituales y por lo mucho que falláis en la obediencia.

Me alegro con Mis hijos obedientes, con los que Me obedecen y a cada instante luchan por no caer, con los que se esfuerzan por levantarse. Me alegro de los que permanecen disponibles para ayudar a sus hermanos y hermanas, y me regocijo con los que difunden Mi Voluntad, siendo una Llama que arde en medio de las tinieblas.

Esta Palabra Mía es apreciada por Mi Pueblo, y entre Mi Pueblo están Mis Hijos de los Sagrados Corazones, a quienes amo, y bendigo su perseverancia en estos grupos de oración.

Pueblo Mío, no olvides que en este instante todo el poder del mal se está derramando sobre la humanidad: cada persona debe ser un faro que ilumine el camino hacia Mi Misericordia para que tus hermanos y hermanas no tengan miedo de arrepentirse o de continuar en Mi Camino.

Reza, lo que se te ha revelado está siendo experimentado por esta generación. Reza, las grandes naciones son cada vez más inseguras. Reza, los elementos se abalanzan sobre el hombre, haciéndole sufrir lo indeseable. Orad, la tierra tiembla, y con esta sacudida cambia la geografía.

Mi amado pueblo, no temas, arrepiéntete, no temas, conviértete; NO TEMAS, YO SOY EL AMOR SIN FIN, EL VERDADERO AMOR. "Yo Soy La Verdad Y La VIDA » (Jn 14:6).

Os bendigo con Amor Infinito.

Tu Jesús

SALVE María Purísima, Concebida Sin PECADO

SALVE María Purísima, Concebida Sin PECADO

SALVE María Purísima, Concebida sin PECADO

(1) Revelaciones y profecías sobre el gran Aviso, lee ...