Mensajes para John Leary en Rochester NY, EEUU
domingo, 10 de marzo de 2019
Domingo, 10 De Marzo De 2019

Domingo 10 de marzo de 2019: (Primer domingo de Cuaresma)
Jesús dijo «Pueblo mío, el Evangelio de hoy sobre mis cuarenta días de ayuno en el desierto, es una señal para celebrar los cuarenta días de Cuaresma. Durante este tiempo también ayunáis entre comidas, os arrepentís de vuestros pecados en la Confesión, compartís vuestro dinero, tiempo y talentos con los necesitados, y continuáis con vuestras oraciones diarias. En el desierto sufrí tres tentaciones del demonio. La primera fue convertir las piedras en pan para saciar mi hambre, pero le dije al diablo que no sólo de pan vive el hombre. Tiene necesidad de saciar su hambre y su sed, pero debe confiar en Mí para que le proporcione alimento y agua para sus necesidades. El diablo me tentó queriendo entregarme el poder del mundo si me inclinaba ante él, pero le dije que todos debéis adorar sólo a Dios. Muchos son tentados a adquirir dinero y posesiones para tener poder y comodidades. Algunos incluso matan por dinero, o venden su alma por fama y fortuna. Así pues, no adoréis cosas ni personas, sino sólo a vuestro Dios del cielo, según el Primer Mandamiento. La tercera tentación fue la del orgullo, así que me arrojaría por un precipicio para que los ángeles me protegieran, pero le dije al diablo que no tentara al Señor tu Dios. El orgullo es una gran tentación para mostrarse ante la gente como famoso y conocido. Esto conduce a muchos pecados, pero sé humilde y amante de tu Dios y de tu prójimo. El diablo te tienta para ganar tu alma, pero no sigas sus mentiras y engaños porque Yo te amo siempre, y el diablo te odia. Entregad vuestra voluntad a Mi Voluntad en todo lo que hagáis, y un día tendréis vuestra recompensa en el cielo».
Jesús dijo «Pueblo mío, estoy orgulloso de Mis guerreros de la oración por manteneros firmes contra los pro-muerte en el edificio de Planned Parenthood que practica abortos. El padre Michel rezó algunas oraciones de exorcismo en latín. Luego agitó el humo del incienso por todo el edificio para intentar cerrar esta clínica abortista. Luego rezaste tres rosarios y la Coronilla de la Divina Misericordia para detener los abortos. Viste cinco coches de policía que intentaron intimidarte sin éxito. Todavía te asombra que las madres sigan matando a sus propios hijos en el vientre materno. El demonio intenta matar al mayor número posible de bebés. Sigue rezando para detener los abortos, por mucho que esta gente te persiga por tus esfuerzos por salvar a Mis bebés. Matar bebés va contra Mi Quinto Mandamiento, y si tu país no detiene los asesinatos, puedes esperar más castigos de desastres naturales. Aprended de vuestros errores, o continuaréis con vuestros pecados y peores castigos. Os amo a todos, y es necesario que améis también a cada uno».
Origen: ➥ www.johnleary.com
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