miércoles, 26 de septiembre de 2007

Miércoles, 26 de septiembre de 2007

(San Cosme y San Damián)

Jesús dijo: “Mi gente, esta sencilla morada de un hogar es como quiero que viváis en humilde fe. Vivir sencillamente significa que no hacéis las cosas para presumir ante los demás, sino que significa vivir en total consagración a Mí en plena obediencia a Mis caminos y no a los caminos del hombre. Llamé a Mis apóstoles a salir y evangelizar todas las naciones para la presencia de Mi Reino. Quería que vivieran sencillamente sin llevar mucho equipaje, y dependieran enteramente de Mí en plena confianza de que Yo les proveería. Aquellos que evangelizan almas, merecen su sustento para ser apoyados por aquellos que los acogen en su pueblo. Aquellos que persiguen a Mis evangelizadores, serán tratados con Mi justicia. Mis discípulos sacudirán el polvo de ese pueblo de sus pies en testimonio contra ellos. Así como llamé a Mis apóstoles a proclamar el Reino de Dios, así llamo a todos Mis fieles a extender la mano y compartir su fe con los demás. Proclamad Mi Reino y llamad a la gente a la conversión en el arrepentimiento de sus pecados. No tengáis ninguna preocupación, ni estéis ansiosos si la gente rechaza Mi mensaje, sino sed fieles a vuestra misión de ofrecer Mi invitación de amor a todas las almas. Al hacer vuestro trabajo, habréis cumplido vuestra responsabilidad de llevar Mi Palabra al pueblo. Entonces será su responsabilidad aceptar Mi Palabra y vivir según ella en sus acciones.”