viernes, 5 de julio de 2013

Mensaje De Nuestra Señora Y Santa Rosa De Viterbo - Comunicado Al Vidente Marcos Tadeu - 19ª Clase De La Escuela De Santidad Y Amor De Nuestra Señora

Jacareí, 5 de Julio de 2013

19ª Clase de la Escuela de Santidad y Amor de Nuestra Señora

Transmisión Diaria De Apariciones En Directo Por Internet En World Webtv: Www.apparitionstv.com

Mensaje De Nuestra Señora Y Santa Rosa De Viterbo

(Marcos): "Por siempre sean alabados Jesús, María y José. Sí. Sí. Sí".

(María Santísima): «Amados hijos Míos, esta noche os invito a mirarme de nuevo a Mí, vuestra Madre Celestial, en Mi Aparición en La Salette, en Francia, a Mis dos hijitos Maximino y Melanie».

Seca Mis lágrimas, las lágrimas de dolor y de amor que derramé en Mi Aparición en La Salette, haciendo realmente que se produzca la gran conversión en tu vida. Volveos a Dios con todo vuestro amor, con toda vuestra alma, con toda obediencia y fidelidad a Sus Mandamientos, haced la voluntad de Dios que para vosotros será siempre el camino hacia la verdadera felicidad.

Seca Mis Lágrimas, las Lágrimas de Dolor y de Amor que derramé en Mi Aparición en La Salette viviendo una vida de profunda oración, de profundo amor a Dios, viviendo una vida de intimidad con Dios y Conmigo mediante la oración continua hecha con el corazón con verdadera sed y deseo de conocer, amar y servir a Dios, de conocer, amar y servir también al corazón de tu Madre Celestial. Entonces secarás Mis Lágrimas con el dulce aroma, el dulce perfume de tu oración hecha con el corazón, llenarás Mi Corazón de alegría, darás a Mi alma consuelos verdaderamente inauditos y entonces Mi Corazón en ti se alegrará y regocijará.

Seca Mis Lágrimas, buscando cada vez más vivir y obedecer todos los Mensajes que te he dado para que cuanto antes este mundo pueda ser liberado de la esclavitud del pecado y de Satanás y Yo pueda destruir, aniquilar Su imperio infernal en el mundo y levantar el Reino glorioso del Sagrado Corazón de Jesús, con tu ayuda, con tu sí, con tu obediencia a Mis Mensajes haremos realmente que esta gran Victoria se realice. Y entonces Mis Lágrimas se secarán finalmente por vosotros y Mis Ojos que antes eran fuentes de lágrimas se transformarán en fuentes de Luz, en fuentes de alegría y Mi semblante que en Mi Aparición en La Salette era doloroso será finalmente un semblante sonriente, porque entonces la Madre, la Madre Celestial será amada, obedecida, escuchada, correspondida y glorificada en Sus hijos y a través de Mi Corazón Inmaculado Jesús instaurará en el mundo entero Su glorioso Reino de amor.

Os pido a todos, continuad rezando el Santo Rosario todos los días, continuad haciendo todas las Horas de Oración que os he pedido aquí, cuántas, cuántas almas ya están sintiendo la belleza y la gracia de estas oraciones rezando todos los días junto a Mí y a Mi hijito Marcos en esta transmisión diaria del Cenáculo y de Mi Aparición. Verdaderamente pronto miles, millones de almas y muchas regiones de la tierra serán sanadas espiritualmente.

Seguid adelante, adelante, Yo estoy con vosotros, os amo, os guardo, os protejo y estoy a vuestro lado en todo momento.

Bendigo afectuosamente a todos hoy desde La Salette, desde Acquaviva Platani y desde Jacareí.

Paz hijos míos, paz a ti Marcos, el más trabajador y dedicado de Mis hijos".

(Marcos): "Sí, sí. Sí, amada Santa Rosa, sí".

(Santa Rosa de Viterbo): "Amados hermanos Míos, Yo Rosa de Viterbo, me alegro de estar de nuevo con vosotros Hoy aquí para daros otro Mensaje.

Os pido a todos Sed ríos de amor, que transmitan al mundo entero la gracia de Dios, Su paz, Su amor, la verdad de Su palabra, transformando así el desierto de este mundo en un nuevo jardín verde, cuántas almas están ya secas, áridas, desiertas por la falta de oración, por el alejamiento de Dios, por la vida pasada continuamente en pecado mortal y habitual. Y es necesario que este inmenso desierto en que se han convertido las almas de este tiempo vuestro malo y perverso, es necesario que estas almas se transformen de nuevo en un jardín de belleza, de gracia y de santidad, para ello, debéis ser ríos de amor que lleven el amor de Dios a todas estas almas, llevándoles los Mensajes de los Sagrados Corazones, llevándoles el verdadero amor de Dios, el amor de la Santísima Virgen, y sobre todo, haciendo brillar cada vez más vuestros buenos ejemplos de santidad para que así el mundo entero vea y crea en el Señor.

Sed ríos de amor, viviendo en una profunda vida de oración, de intimidad con Dios, para que luego podáis dar a las almas el agua del amor de Dios. ¿Cómo podéis dar el agua del amor del Señor a las almas secas y áridas si vosotros mismos sois áridos? Por eso debéis vivir una vida de oración intensa, de oración hecha con el corazón, con verdadera sed de conocer, amar y obedecer a Dios y a Su Santísima Madre, y no sólo oración por costumbre, de la boca para fuera, sino oración que salga verdaderamente de dentro, de lo más profundo del corazón.

Vive en meditación continua, pues el alma que medita conocerá la voluntad de Dios sobre ella, su alma estará siempre llena del agua vivificante del Espíritu Santo y nunca se secará. El alma que no medita no conocerá la voluntad de Dios sobre ella, no conocerá el estado de su propia alma, permanecerá seca, estéril y espiritualmente muerta y en ese estado la muerte física y corporal la sorprenderá y la llevará a las llamas del infierno. Por tanto, vivid en profunda meditación, pues sólo con la meditación vuestras almas se llenarán del amor de Dios, que nace del conocimiento de Su belleza, de Su amor, de Su gracia, de Su bondad, de Su santidad y perfección, y entonces vuestras almas rebosantes de alegría, de amor a Dios, de santos deseos de ser santas para dar alegría a Dios, podrán compartir, dar y llevar el agua del amor del Señor a todas las almas que aún no Le conocen.

Por último, sed ríos de amor, amando a la Santísima Virgen con todo vuestro corazón, obedeciendo todos los Mensajes que Ella os dé Aquí, para que entonces fluya de vuestro corazón un río de amor, de gracia, de santidad y de paz, y como un dique que se rompe vuestro corazón pueda hacerlo fluir entre las personas llenas de pecado, de odio y de maldad el río del amor del Señor y de la Madre de Dios y así poco a poco el desierto de este mundo volverá a florecer y en lugar de frutos venenosos podrá dar frutos de santidad para mayor gloria de Dios y salvación de todas las almas.

Yo, Rosa de Viterbo, prediqué imperturbablemente en mi tierra la palabra del Señor, reprendiendo a los malvados, llamando a los pecadores a la conversión, exhortando a todos a convertirse sin demora. He aquí que vosotros también debéis ser como Yo y anunciar a todos que no hay más tiempo que perder, que el Señor no se demora y ya viene, y ¡ay de aquellos a quienes encuentre en paz con sus pecados!

Anunciad a todos que hagan la guerra a sus pecados, a sus defectos, para que así cada uno se empecine cada día en buscar la perfección y la santidad para vuestro encuentro con Aquel que Es: Santo, Santo, Santo.

Decid a todos que para amar a Dios y conocer a Dios, para ser amigo de Dios, primero cada uno tiene que conocer, amar y ser amigo de Su Santísima Madre, porque como bien os dijeron San Alfonso de Ligorio y San Luis de Montfort fue a través de la Santísima Virgen como Dios vino al mundo y Él no quiere que nadie llegue a Él si no es a través de Ella, a través de Su Madre.

Yo, Rosa de Viterbo, estoy contigo en todo momento, te bendigo y te quiero mucho, te bendigo especialmente Marcos el más querido y ardiente amigo de los Santos del Cielo y Mi amigo también, hoy cuando estabas haciendo el Rosario de Mi querida hermana St. Inés de Catania los demonios estaban atados en el infierno, las puertas del infierno estaban cerradas y nadie estaba condenado en esa hora, los demonios estaban cegados por la luz que salía de sus bocas, de sus ojos y de sus corazones y ya no podían ver a las almas que querían tentar y llevar al pecado. Y al mismo tiempo una abundante lluvia de gracias, bendiciones y misericordia cayó sobre toda la tierra.

Os bendigo por ello y os digo: cuantas almas se conviertan por este nuevo Rosario de Santa Inés, así como todas las almas que se conviertan por la Hora de los Santos que habéis hecho en Nuestra alabanza en alabanza de los Santos serán otras tantas coronas de gloria que Nosotros los Santos os daremos en el Cielo. Os bendigo con amor y a todos los que Me escucháis con amor y fe ahora y os doy a todos en este momento Mi protección y una gran lluvia de gracias celestiales."

(Marcos): "Hasta pronto querida Santa Rosa. Hasta pronto querida Madre del Cielo".

Cds De Oraciones Rezadas En Este Cenáculo:

7ª Trezzena 5º Día

4ª Triena - 5º Día

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