domingo, 19 de noviembre de 1995

Mensaje de Nuestra Señora

Hoy, lo que quiero decir a cada uno de ustedes es que sean puros, Mis queridos hijos, oren con la pureza que viene de DIOS, pureza, Mis hijos, del alma, del cuerpo, del corazón, para que de esta manera, Mis hijos, puedan verdaderamente Honrar esta maravillosa Gracia que DIOS les ha dado: - La Gracia de ser Templos Vivos y Tabernáculos del Espíritu Santo!

De esta manera, Mis hijos, podrán sentir todo lo que les digo con AMOR, y entenderán, Mis hijos, cuál es el Camino de Santidad que quiero guiarlos y llevarlos a: - el Camino, Mis queridos hijos, de pureza, es el Camino de Santidad!

Que su mente rechace, cada día más, Mis queridos hijos, toda la malicia, toda la astucia del enemigo, y que esté abierta a todas las inspiraciones que el Espíritu Santo quiere colocar en ustedes.

Puros de corazón, Mis hijos, es que su corazón nunca experimente la mancha del odio, la mancha del rencor, la mancha, Mis hijos, de incredulidad, de la enfermedad de la falta de fe. Que su corazón esté lleno de vida, lleno de alegría, lleno de AMOR, quemado con Caridad, consumido con Pasión! (AMOR POR DIOS)

Puros de cuerpo! Les pido a todos que sean puros, porque hoy la mayoría de los pecados del mundo son pecados de sensualidad, pecados de impureza. Hoy, cada uno exhibe y exalta su cuerpo como si fuera un dios, convirtiéndose así en trampas de pecado para otros. Sean puros, Mis hijos!

Les pido a los jóvenes una gran pureza de cuerpo, especialmente a aquellos que son tan tentados por el diablo.

Les pido a los novios que se abstengan de toda relación antes del matrimonio, y que los jóvenes se consagren más a Jesús, porque los jóvenes que siguen a Jesús son muy pocos. Así que mis hijos, si son puros en cuerpo, alma y mente, pueden sentir todo el AMOR del Espíritu Santo en su corazón. Y entonces, morando en ustedes, Él puede cuidar a toda su familia, toda su vida, todo su trabajo y toda su vida.

Oren, Mis hijos! Oren más! Oren mucho para que Mi TRIUNFO suceda lo antes posible!

Cuento con su oración, en estos días de una manera muy especial, por mi querido hijo Juan Pablo II, el Santo Padre el Papa. Oren por Él! Esto es lo que desea mi Inmaculado Corazón!

Gracias por su AMOR por Mí! Los bendigo en el nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Permanezcan en la Paz del Señor".