jueves, 20 de agosto de 2020

Mensaje de Nuestra Señora Reina de la Paz a Edson Glauber

¡Paz mis queridos hijos, paz!

Hijos míos, os he estado llamando a Dios durante mucho tiempo, pero muchos de vosotros no me escucháis y no aceptáis mis súplicas en vuestros corazones. He derramado muchas lágrimas y lo he manifestado visiblemente en muchos lugares del mundo, y muchos de los corazones de mis hijos permanecen endurecidos y cerrados, insensibles a mi dolor.

Os hablo y permanecéis sordos a mi voz. Os bendigo con tanto amor, y a menudo despreciáis mi bendición maternal, pecando y ofendiendo a mi Divino Hijo con vuestros terribles pecados y ultrajes.

Volved, volved al Señor. El Padre Eterno está muy enfadado y ofendido, a causa de esta humanidad ingrata y sorda. Ya tiene el brazo levantado, dispuesto a castigaros, si continuáis siendo desobedientes y rebeldes a sus divinas llamadas a vosotros a través de mí. El Padre, el Hijo y el Espíritu Santo me han enviado desde el cielo para ofreceros amor, protección y gracia. Convertíos, hijos míos, convertíos cuanto antes, pues el gran castigo divino será ahora con fuego, el terrible fuego de la justicia de Dios, y muchas almas corren peligro de perderse eternamente.

Muchas almas están en peligro de perderse eternamente, porque están ciegas, sordas y muertas espiritualmente a causa del veneno mortal de Satanás, que las ha destruido con sus muchas mentiras y errores satánicos. Rezad el Santo Rosario intensa y diariamente, y Dios tendrá misericordia de cada uno de vosotros y de vuestras familias. La oración hecha con amor y con el corazón tiene la fuerza y la gracia divina para destruir el poder del infierno. Rezad, rezad, rezad, y todos los males corporales y espirituales serán desterrados de vosotros y de vuestras familias. Os amo y os bendigo: en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.