jueves, 3 de octubre de 2024

Oirás Gritos De Desesperación, Algunos Se Arrepentirán Y Pedirán Perdón, Pero Será Demasiado Tarde

Mensaje de María Santísima a Myriam Corsini en Carbonia, Cerdeña, Italia, el 28 de septiembre de 2024

La Santísima Trinidad te envuelve en Sí, ¡el Cielo ya está en la Tierra!

En esta Colina brotarán nuevas flores, todo será ante la inminente llegada de vuestro Creador Señor Jesucristo.

La aurora del nuevo día está cerca, hijos Míos, alimentaos de la Palabra de Jesús y estad preparados en cualquier momento porque de repente estallará la gran tormenta: ...un trueno se sentirá en el Cielo y será la ira del Padre, será Su justicia que vendrá sobre los hombres, sobre esta Humanidad perversa.

Separará las cabras de las ovejas, se llevará a Sus hijos, los pondrá a salvo mientras dejará aquí, en la tribulación de este mundo, a todos los que Le han negado, a los que Le han blasfemado, a los que en el encuentro cara a cara con Él Le seguirán negando.

He aquí, hijos Míos, la gracia que os doy es la de la Advertencia: abriréis vuestros ojos, vuestros corazones a vuestro Padre, Le invocaréis con todas vuestras fuerzas.

Le abrazaréis en vuestros corazones, imploraréis Su Misericordia.

Hijos Míos, dentro de poco esta Tierra arderá, será un desastre para la Humanidad, para todo ser vivo, para la naturaleza, ...¡para todo, hijos Míos!

Nosotros, desde el Cielo, vemos el progreso de esta Humanidad, ...sí, ¡lloramos lágrimas de sangre, cada vez más calientes, hirviendo! El Señor no puede más, Dios Padre está diciendo que ha llegado Su hora, ¡ha llegado el momento de intervenir con Su Basta! Amén.

María Santísima, está aquí con vosotros, abre Su manto sobre cada uno de vosotros, os estrecha contra Su Pecho, une Sus manos a vuestras manos en la oración del Santo Rosario y con vosotros suplica por el retorno anticipado de Su Hijo Jesús.

Oh, Padre Generoso y Santo

Tú que has creado todo el Universo

Tú que eres nuestro Padre

Tú que eres nuestro Dios

Tú que todo lo puedes

anticipa el regreso de Tu Hijo a esta Tierra, pon paz en los corazones de los hombres, dales paz y serenidad hasta que te los lleves contigo.

Ayúdalos en este camino, fortalécelos, pon en ellos Tu Escudo, ponte Tú Señor, fórjalos en Ti.

La hora del Calvario para esta Humanidad está ya cerca, Hijos Míos, ¡la Iglesia se derrumbará ahora! El ataque es inminente, lo veréis con vuestros propios ojos: oiréis gritos de desesperación, algunos se arrepentirán y pedirán perdón, pero será demasiado tarde, un pecado demasiado grande, tendrán que experimentar la gran tribulación.

Rezad sin cesar, hijos Míos, abrazaos unos a otros, que vuestros corazones estén unidos.

Proveed a las necesidades de los pobres, pronto tendréis que dar vuestro apoyo, tendréis que instruirles de la Palabra de Dios para que se conviertan y vuelvan a Él.

La tierra se mueve, los tambores ruedan hacia la muerte, pronto todo será sofocado por una bola de fuego, el humo abarcará toda la tierra, el aire se hará irrespirable, debéis estar ya en vuestros hogares y habréis sellado ya vuestras ventanas y puertas.

La ayuda del Señor estará en vosotros, seréis advertidos y estaréis preparados, capacitados para sellar a tiempo vuestras puertas y ventanas.

Tened a mano las velas, las cerillas, el aceite, las lámparas, tenedlo todo a mano porque va a suceder, hijos míos, ¡¡¡va a suceder!!! No es una broma, ¡va a suceder! ¡Olvidaos de las cosas del mundo, ya nada os pertenece, poneos en manos de Dios y refugiaos en Él! ¡Pensad en las Cosas de Dios, trabajad para Él, para Su voluntad, para lo que os ha pedido! Remediad vuestros pecados pidiendo continuamente Su perdón, pedid Su misericordia y, postrándoos ante Él, ante Jesús Crucificado, pedid perdón por esta Humanidad perversa, pedid perdón por vuestros seres queridos, rezad tanto por ellos, que el Señor tenga misericordia de todos, rezad, hijos Míos, rezad.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, os bendigo, teniendo Mis manos unidas a vuestras manos. Adelante, hijos Míos, ...¡un poco más! La batalla es dura y será dolorosa, pero con el Cielo junto a vosotros superaréis toda dificultad. Amén.

Origen: ➥ ColleDelBuonPastore.eu