sábado, 30 de marzo de 2024

Hijos Míos, Rezad, Rezad y Rezad Más; Vuestra Vida Conviértase en Oración ¡Oh Hijos!

Mensaje de Nuestra Señora a Marco Ferrari en Paratico, Brescia, Italia, el 26 de marzo de 2024, Con ocasión del 30º Aniversario de Su Aparición a Marco

Mis queridos y amados hijos, gracias por venir aquí en oración. Hijos míos, hemos caminado, hemos recorrido juntos el camino, aún caminaremos, hijos, porque deseo llevaros a todos a Jesús. Hijos míos, rezad, rezad y rezad más; vuestra vida conviértase en oración, ¡oh hijos!

Ya veis, hoy no se sirve a Su amado ángel, es María la que bendice a este manso instrumento Suyo, es María la que se dirige a cada uno de vosotros a través de Su voz (*), igual que a través de Su vida fue instrumento y testigo del Amor Misericordioso de Dios.

Hijos míos, ¡acoged a Jesús en vuestras vidas, abrid vuestros corazones, acoged Su amor y llevadle al mundo!

Amados hijos, el mundo se aleja cada vez más de Dios, pero vosotros rezad, rezad hijos, rezad, permaneced bajo Mi manto; aquí bajo Mi manto estáis cobijados, estáis protegidos.

He aquí, amados hijos, os doy las gracias por venir aquí en oración, abro Mi manto y cubro a todos Mis hijos por todas partes esparcidos por el mundo que están en oración con vosotros, que están unidos idealmente a vosotros en oración.

Bendigo a todos, hijos Míos, bendigo de Mi corazón a los que sufren, a los que viven lejos del amor de Dios. ¡A todos Mi bendición maternal! Oh hijos, os bendigo en nombre de Dios que es Padre, en nombre de Dios que es Hijo Jesús vuestro hermano, en nombre de Dios que es Espíritu de Amor. Amén.

Oh hijos Míos, gracias por venir aquí, pero antes de despedirnos, ¿diremos juntos esa oración que ya os he hecho aprender todos estos años, la diremos de corazón a Jesús? ¿Eh niños? Jesús, ¡te quiero! Jesús, ¡Te quiero! ¡Jesús, te quiero Jesús! ¡Jesús!

Os beso, os estrecho contra Mi corazón. ¡Ciao hijos Míos!

(*) Como es costumbre Marco tiene la aparición de la Virgen que le deja Su mensaje y luego lo transcribe con la ayuda de Su ángel de la guarda.

En esta extraordinaria aparición los presentes oyeron de la voz viva de Marco las palabras que María pronunciaba.

Origen: ➥ mammadellamore.it