martes, 12 de febrero de 2013

Solo con Mi Hijo encontrarás el descanso.

- Mensaje No. 33 -

Hijo mío, Hijo querido mío. Siempre estamos contigo. Tus mensajes, Nuestra Palabra, son necesarios para preparar a tantas almas como sea posible para los tiempos venideros. Eres Nuestro hijo, elegido para transmitir Nuestra Palabra a la humanidad.

Hijo mío. Aún muchas almas necesitan ser salvadas. Por eso la difusión de Nuestra Palabra es tan extremadamente importante. Ustedes (todos) hacen bien en escucharnos y creer en la autenticidad de Nuestros mensajes. A través de ellos te preparamos, y a través de ellos despertamos a muchas almas.

Mi Hijo Jesús, tu Salvador, está ahí para ti, y tiene Su misericordia lista para cada alma. Ábrete (a Él), hijos queridos míos, para que también encuentren la paz y la alegría que tanto anhela tu alma. Porque solo con Él, Mi Hijo, encontrarás el descanso.

No hay nada en tu mundo que pueda darte satisfacción alguna vez. Solo a través de Mi Hijo, tu Salvador, conocerás la satisfacción, solo con Él te sentirás seguro y protegido, solo a través de Él experimentarás la alegría verdadera y genuina que tu alma necesita para estar sana.

Queridos hijos, no esperen más. Regresen. Vengan a Jesús, tu Jesús. Con los brazos abiertos te espera, listo para regalarte gracias y amor. Levántense por Él y ámalo, porque entonces podrás ser salvado y tu alma podrá vivir en paz eterna y gran alegría a Su lado. Vengan ahora, hijos queridos míos. Que no pase más tiempo. ¡Decidan ahora! Los amamos mucho, y nos regocijamos por cada alma que encuentra su camino hacia Nosotros.

Gracias, hijos queridos míos, por responder a Nuestra llamada.

Tu Madre amorosa en el Cielo y Jesús, quien dio Su consentimiento.

Hijos míos, oren a Nosotros: Oración No. 8 - Oración para asistencia para la acción correcta.

Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros en el trono de Dios por la gracia de conocer y hacer lo que es correcto. Pide que podamos permanecer firmes y rechazar todas las mentiras. Pide fuerza para nosotros para que no nos desviemos del camino que nos lleva a Tu Hijo, Jesucristo, para entrar al paraíso juntos con Él. Amén.

Yo ayudaré a todos los que digan esta oración. Incluso a aquellos por quienes se dice. Esto lo prometo. Tu Madre en el Cielo.