viernes, 4 de febrero de 2011

Viernes, 4 de febrero de 2011

Viernes, 4 de febrero de 2011:

Jesús dijo: “Mi gente, hay un remanente fiel que está cerca de Mí en la Misa y en sus oraciones diarias. Algunos incluso Me visitan a diario en la Adoración de Mi Santísimo Sacramento. Han sido fieles a Mí incluso durante muchos años. Han visto en el Evangelio cómo San Juan el Bautista dio testimonio de Mí al no tener miedo de decirle al Rey Herodes que era ilegal casarse con la esposa de su hermano. Él dio testimonio de su fe, aunque podía correr el riesgo de perder la vida al hacerlo. Así que Mis fieles de hoy también necesitan dar testimonio de su fe, como en la protesta contra los abortos y en el consejo a las personas de que es ilegal que las parejas vivan juntas en constante fornicación. Esto incluso podría poner en peligro su vida a medida que el tiempo de la persecución religiosa se intensifica. No tengan miedo de defender su propia fe en Mí, y rechacen cualquier chip en su cuerpo. Pronto entrarán en el tiempo de la tribulación, cuando los malvados intentarán matar a cristianos y patriotas. Por eso he tenido a Mis fieles construyendo refugios para su lugar de protección durante la tribulación.”

Jesús dijo: “Mi gente, busco que todos Mis fieles vengan a Mí en Confesión, ya que soy como el padre del Hijo Pródigo esperando el regreso de su hijo. También estoy esperando que todos ustedes regresen a Mí en Confesión para que pueda romper la cadena de sus pecados y devolver Mi gracia a su alma. No es fácil para algunos venir a Confesión porque significa que tienen que admitir que son pecadores y necesitan que sus pecados sean limpiados en Mi sacramento de la Penitencia. Al tragar su orgullo, están siendo humildes al admitir la culpa de sus pecados. Deseo que vengan a Confesión tan a menudo como deseen, pero al menos una vez al mes. Cuando confiesan a menudo, esto no es una señal de debilidad o que son un gran pecador, sino que significa que quieren estar cerca de Mí en el estado de gracia tanto como sea posible. Necesitan ser constantemente vigilantes en la protección de su alma, para que siempre estén listos para encontrarme en su juicio cuando los llamo a casa a su muerte. Al confesar con frecuencia y con todas sus oraciones devocionales, también están minimizando cualquier pecado no perdonado que será examinado en su experiencia de Advertencia en su mini-juicio. Mi Advertencia será una extensión de Mi Divina Misericordia para todos los pecadores. Incluso los peores pecadores se despertarán en sus vidas espirituales, y se les dará una segunda oportunidad para cambiar sus vidas. Todos entenderán cómo sus pecados Me ofenden, y cuán importante es pedir Mi perdón. Muchos cambiarán y podrían ser salvados, pero otros necesitarán la ayuda de Mis guerreros de oración para encontrar un camino a la conversión. Oren para que aquellos en su familia, que están lejos de Mí, sean sanados y convertidos en Mi Advertencia.”