miércoles, 29 de septiembre de 2010

Miércoles, 29 de septiembre de 2010

Miércoles, 29 de septiembre de 2010:(San Miguel, San Gabriel, San Rafael)

San Miguel dijo: “Soy Miguel, y estoy delante de Dios para constantemente darle alabanza y gloria. En estos últimos días, eres parte de la batalla entre los buenos espíritus y los espíritus malignos en una lucha por las almas. Nosotros los Arcángeles no solo somos mensajeros, sino que somos parte del ejército de Dios para luchar contra los demonios y proteger las almas en la tierra de perderse. Cada vez que nos llamas para que te ayuden en tu misión, estamos allí con miles de ángeles para potenciar tu lucha para salvar almas. Sé que oras por Mi ayuda todos los días en unión con tu ángel guardián, Marcos. Eres probado de muchas maneras con obstáculos para detener tu trabajo, pero donde nos lo permiten, podemos hacer tu camino menos obstruido. Continúa orando a Mí y a los otros buenos ángeles para que te ayuden en tu trabajo. Viste en la visión la paloma del Espíritu Santo y a Mí luchando contra los demonios en el mundo. Confía en Dios y en nuestra ayuda, ya que Él nos dirige.”

Jesús dijo: “Mi pueblo, la agricultura o la granja es una gran industria que requiere empresas de semillas y empresas de fertilizantes. Una buena parte de tus cosechas se puede cosechar con máquinas, pero aún se necesitan trabajadores. Otros cultivos, que son más sensibles, requieren trabajadores para recoger y recolectar las cosechas. Incluso cuando se les da una oportunidad, muchos estadounidenses no quieren la mano de obra barata y el trabajo duro en los campos. Muchos agricultores necesitan tener trabajadores inmigrantes para recoger sus cosechas o sus cosechas no podrían ser cosechadas. Muchos estadounidenses dependen de sus agricultores para su comida, pero los agricultores apenas ganan la vida con todos sus costos de hacer negocios. Si los agricultores no recibieran algunas subvenciones, no podrían ganarse la vida. Aunque el problema inmigrante causa problemas políticos con el crimen y los derechos, sí cumplen una necesidad al recoger las cosechas que comes en América. De nuevo, agradece que tus agricultores e inmigrantes estén haciendo su trabajo para alimentar a América y exportar sus excedentes.”