viernes, 21 de junio de 2013

Transmisión diaria en directo por Webtv

Mensaje de Nuestra Señora

(Marcos): ¡Que Jesús, María y José sean alabados por siempre! Sí, sí, ya está hecho, ya está ahí. Sí, lo recuperaré.

"Mis amados hijos, esta noche nuevamente os invito a ser fieles y perseverantes en Mi Escuela de Santidad, que son Mis Apariciones Aquí en Jacareí.

"Poned Mis Apariciones en primer lugar, poned Mis Mensajes en primer lugar y Dios también os pondrá en primer lugar en Su amor. Cuando pongáis a Dios, a Mí y a Mis Apariciones en primer lugar en vuestras vidas, entonces el Espíritu Santo actuará poderosamente en vuestra existencia, realizando grandes gracias, maravillas y transformaciones, dentro, alrededor y fuera de vosotros.

La razón por la que muchas veces vuestra vida está sumida en una profunda miseria espiritual es porque aún no habéis puesto en primer lugar Mis Apariciones, por eso el Espíritu Santo está en conflicto con vosotros y por eso no se abaja, no desciende a vuestras almas, no actúa en vosotros porque no Me encuentra a Mí, Su Esposa casta y Divina, en primer lugar en vuestros corazones. Ponedme en el primer lugar con Mis apariciones, y entonces el Espíritu Santo se complacerá en vuestras almas, en vosotros descenderá y hará una transformación profunda, inmensa e intensa en vuestros corazones.

Hoy quiero pediros Rezad más mi Rosario de Lágrimas, porque con este Rosario expulsaré a Satanás de vuestras almas, de vuestras familias, de vuestra nación y del mundo entero. Él, el gran dragón de siete cabezas, vaga ahora por la tierra y arrastra con su caldo a todas las naciones y a todas las almas para llevar a todos a la condenación, seduciendo a todos a la vida del pecado. Yo vengo a combatirle y a hacer que el Primer Mandamiento de la Ley de Dios vuelva a ser amado, respetado y cumplido.

Por eso, hijos Míos, os lo pido una vez más: Poned a Dios, a Vuestra Madre y a Mis Apariciones en primer lugar y entonces, Mi Triunfo contra el gran dragón será verdaderamente una realidad entre vosotros y sucederá pronto, porque Mis tiempos han llegado.

Perseverad en Mi Escuela de Amor y Santidad siendo verdaderas margaritas espirituales de humildad, docilidad a Mi voz, amor, obediencia, renunciando a todo lo que os aleja de Dios, os aleja de Mí y a todo lo que debilita la oración en vuestras almas.

A todos en este momento bendigo generosamente, especialmente a todos Mis hijos que ahora Me escuchan con amor, a todos los que estáis aquí presentes y a ti Marcos, el más trabajador y dedicado de Mis hijos. Os doy las gracias por el nuevo Rosario Meditado (nº 288) que habéis grabado para Mí hoy por la tarde, cada nuevo Rosario Meditado que hacéis para Mí provoca no sólo en Mí, sino también en el Señor Dios y en todos los Ángeles y Santos una gran alegría, un gran gozo, una gran satisfacción y la Misericordia Divina anula tantos castigos que deberían venir al mundo para castigarlo por sus crímenes y pecados y una lluvia de misericordia desciende sobre toda la tierra.

A todos vosotros en ese momento os bendigo Fátima, Montichiari y Jacari".

(Marcos): "¡Hasta pronto, sí! Hasta pronto, querida Madre del Cielo".