Vi a la Madre de Fátima vestida toda de blanco, con un velo blanco fino sobre su cabeza y una corona real, un manto ancho blanco con bordes dorados sobre sus hombros, un cinturón dorado en su cintura. Las manos de la Madre estaban juntas en oración y entre ellas había un Santo Rosario hecho de gotas de hielo
Alabado sea Jesucristo
Queridos hijos, os amo y os doy gracias por responder a mi llamada
Mis queridos hijos, no temáis, siempre estoy con vosotros
Hijos, dejad que os amen, tomadme de la mano, dejad que os guíe
Mis hijos, cuando el camino de vuestra vida se vuelve áspero y difícil, dejad que os lleve en mis brazos, cuidaré de vosotros, vendaré vuestras heridas, secaré vuestras lágrimas y refrescaré vuestros corazones
Mis queridos hijos, siempre estoy con vosotros. No os apartéis de mi Corazón Inmaculado. Dejad que os guíe, cuide y consuele
Hijos, orad, orad por Mi amada Iglesia, orad por Mis amados e hijos favoritos que más son tentados por el mal, orad por el Santo Padre, Vicario de Cristo en la tierra, orad, hijos, para que la Iglesia sea Una, Santa, Católica y Apostólica, orad por mi amada Iglesia para que no pierda la verdadera enseñanza de la fe, orad, hijos, para que el mal no prevalezca, orad por todos aquellos que aman el mal, por los que buscan paz, alegría y amor en caminos equivocados, orad por quienes hieren Mi Corazón Inmaculado, orad, hijos, por todos aquellos que ofenden e injurian al Sagrado Cuerpo de mi amado Jesús. Orad, hijos, orad
Mis hijos, permanezcan firmes en la fe, fortalezcan su fe con los Santos Sacramentos, con oraciones, inclinen sus rodillas y adoren a Mi amado Jesús en el Santísimo Sacramento del Altar. Mis hijos, os ruego, dejad que os guíen, dejad que os amen.
Ahora os doy Mi Santa Bendición. Gracias por venir a Mí.
Fuente: ➥ MadonnaDiZaro.org