domingo, 13 de julio de 2025

Pronto Entrarás en la Tierra Nueva, Nunca Más Sentirás Dolor, y Nunca Más Serás Perseguido por el Maligno

Mensaje de la Santísima Virgen a Myriam Corsini en Carbonia, Cerdeña, Italia, el 9 de julio de 2025

María Santísima:

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, os bendigo, hijos míos. Os tomo de la mano y os llevo Conmigo a las alturas, donde os espera el Santísimo Sacramento del altar para alimentaros de Sí mismo.

Hoy lloro lágrimas de alegría al veros a todos aquí, reunidos en este lugar sagrado.

Hijos míos, os abrazo, os amo, os estrecho tiernamente a Mi Sagrado Corazón, Jesús está Conmigo, la Santísima Trinidad está Conmigo, Yo les acompaño, Yo estoy en Ellos, somos uno en el Padre Creador.

Oh, hijos Míos, amados hijos, todo está a punto de ser nuevo para vosotros, para vosotros que honráis al Padre con vuestras oraciones y vuestra obediencia a Su santa voluntad.

No perdáis la esperanza, hijos Míos, tened paciencia, Jesús está intentando recuperar algunas almas que son muy importantes para Él.

Algunos que Le han deshonrado, ofendido, traspasado con golpes, hoy están vacilando, cambiando de opinión, invocando Su Nombre, pidiendo perdón.

Oh, amados hijos, qué hermoso es veros a todos juntos. Pronto entraréis en la nueva Tierra, nunca más sentiréis dolor, y nunca más seréis perseguidos por el maligno, que ahora está derrotado. Mis hijos, Mi ejército fiel, son Mi Talón, estarán Conmigo para aplastar la cabeza de la serpiente antigua.

Ha llegado la hora, el momento determinado por las circunstancias, por la voluntad de Dios, por la decisión de Dios de intervenir ahora, porque muchos, muchos, muchos han caído en manos de Satanás y no quieren renunciar a él, no quieren volver a la Vida.

Padre Eterno, Te invocamos, Te suplicamos Tu intervención, Te imploramos que abras esta nueva Tierra donde todos Tus hijos puedan encontrar refugio. He aquí que Yo les acompaño, estoy con ellos, les educo, les instruyo en las Cosas del Cielo, les instruyo sobre Ti, Padre, date prisa, Tus hijos no pueden esperar más en esta situación, ven, apresura el momento del mayor y más precioso don de la Vida en ellos, en la nueva Tierra que Tú has preparado para que habiten junto a Ti.

Os bendigo de nuevo, hijos Míos, uno Mis manos a las vuestras y junto con vosotros suplico la misericordia del Padre.

En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Origen: ➥ ColleDelBuonPastore.eu